La Fiscalía de Málaga ha presentado una acusación contra seis personas y dos empresas por gestionar de forma ilegal neumáticos fuera de uso (NFU) entre 2012 y 2017 en varias naves clandestinas de Mollina, Humilladero y Antequera. Estas instalaciones no cumplían con las medidas mínimas de seguridad, como detección de incendios o planes de emergencia, lo que suponía un serio riesgo medioambiental y para la salud pública, según informes periciales.
Además del almacenamiento irregular, los acusados están implicados en una trama de comercialización de neumáticos inservibles como si fueran de segunda mano. Estos eran importados ilegalmente desde otros países de la UE y exportados a terceros países no comunitarios, principalmente de África y Sudamérica, donde se vendían sin ser aptos para su uso, suponiendo un peligro para los usuarios.
El fraude incluía también la falsificación de certificados de idoneidad para reintroducir estos neumáticos en el mercado, así como el engaño al sistema de gestión ambiental Signus, eludiendo el pago de la ecotasa y sin contribuir al reciclaje reglamentario. En algunos casos, se almacenaban más de mil toneladas de neumáticos sin licencia ni autorización de organismos competentes.
Por estos hechos, el Ministerio Público solicita penas de prisión de entre dos años y tres meses y dos años y medio para los implicados, además de multas que superan los 800.000 euros para las dos empresas. También se imputa a tres de los procesados un delito leve de falsedad documental por incumplir los requisitos legales establecidos para el tratamiento de estos residuos.
