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Jerez

El piano explora y expande el legado musical del guitarrista clásico Ángel Piñero

El Auditorio del Hotel Monasterio de El Puerto acoge este viernes un concierto del painista italiano Paolo Marzocchi, encargado de la adaptación de sus obras

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  • Catherine Lacoste y Paolo Marzocchi posan con el cartel del concierto -

Esta es una historia de amor, y también la de un reencuentro. La de amor la protagonizan Catherine Lacoste y el guitarrista y compositor gaditano Ángel G. Piñero. La del reencuentro, la propia Catherine con el pianista italiano Paolo Marzocchi. El nexo común entre ambas es Ángel Piñero, fallecido ahora hace tres años. "Conocimos a Paolo hace 17 años en el lago Como, donde él tocaba en un concierto, y establecimos una amistad grande con él", relata Catherine, responsable del legado musical de quien fue su pareja durante más de 40 años.

En 2023 impulsó una gira centrada en las composiciones de Piñero para guitarra clásica -hizo escala en el Teatro Villamarta- y el año pasado ideó la adaptación de algunas de sus piezas para piano. Fue ahí donde se produjo el reencuentro con Paolo. "Cuando buscamos a alguien para adaptar a piano las composiciones de Ángel, él se ofreció voluntario" y el pasado 23 de abril tuvo lugar el estreno mundial. Fue en un Concierto de Piano en Tributo a Ángel Piñero en la Sala de Orquesta del Teatro Real de Madrid, en el que Marzocchi presentó dos de las tres fantasías en las que ha venido trabajando: El viento de la vida y Meditación. La tercera, la Danza Andaluza Brisas de Cádiz está pendiente aún de varios retoques, ya que el músico italiano no se encontraba del todo satisfecho con el resultado.

Este viernes 2 de mayo, el Auditorio del Hotel Monasterio de San Miguel, en El Puerto de Santa María, hará de escenario para la presentación del mismo recital en la provincia de Cádiz, en la tierra que tanto amó Ángel y en la ciudad en la que vivió junto a Catherine y donde fundó el Concurso Internacional de Guitarra Clásica, que este próximo julio celebrará su nueva edición.

 "Para mí está todavía vivo", confiesa Catherine, que ha prolongado ese amor por Ángel Piñero hasta el presente de la mano de su obra. "Me legó sus composiciones sabiendo que iba a luchar por ello", y no ha parado de hacerlo, como una extensión de un amor que el propio Marzocchi ha tenido presente a la hora de abordar la adaptación de cada obra.

"Tenía una versión inicial de Brisas de Cádiz, pero no estaba satisfecho. La empecé de nuevo, desde el principio, con mejores soluciones, pero no he podido terminarla a tiempo. Las otras dos composiciones llegaron más allá de donde yo esperaba, porque para mí fue una especie de exploración de la partitura original para intentar entender las posibilidades ocultas en su música. Ha sido un desafío, pero lo he disfrutado mucho", expone el músico italiano.

Catherine Lacoste confiesa sentirse "muy satisfecha con el resultado, ya que se ha respetado muy bien la melodía. El viento de la vida original dura cuatro minutos y él ha hecho variaciones que duran 7, pero siempre respetando y aumentando el sentimiento de la obra. Esta pieza es además un reflejo de la vida de Ángel, que había sido siempre muy movida, con momentos de tormenta y paz que lo ha sabido reflejar muy bien. La otra es Meditación, que compuso durante el Covid, que también es una maravilla. Paolo ha conseguido que se reconozca muy bien su música y es una oportunidad para que siga creciendo la obra de Ángel y siga su camino".

De hecho, no es el único proyecto en el que está ambarcada para seguir adelante con la interpretación de las obras de Piñero. La gira de Tributo a la guitarra ha seguido su curso pasando por Ciudad de México y Monterrey, París, Bonn y Bruselas y este mes de mayo llegará a San Juan de Luz, al que seguirá el estreno de un quinteto de guitarra que ha adaptado Brisas de Cádiz, y "una cosa excepcional en Santander, en la inauguración de una conferencia entre la Fundación Chile y la Fundación Botín, que nos han pedido hacer el concierto de apertura. Cae en el día de mi 80 cumpleaños, y va a ser una cosa maravillosa. Además vendrá Paolo para interpretar la obra Pajaros en Chile y también se interpretará la obra de Ángel, Plenitud, dedicada a América del Sur". Escenarios donde seguirán sonando sus obras. "La gente cada vez las conoce más y tienen una gran aceptación", recalca Lacoste.

El repertorio del concierto de este viernes en El Puerto de Santa María se completa con composiciones de la tradición musical folclórica de otros países europeos: Rumanía, de la mano de seis danzas de Béla Bartók; Hungría, con cinco melodías de Frank Liszt; Albania, a partir de las adaptaciones que Marzocchi ha realizado sobre cinco canciones del folclore tradicional; a las que se suman las dos composiciones de Piñero, en las que se respira asimismo la tradición musical andaluza.

"La idea era llevar al concierto todas esas influencias del folclor europeo a las composiciones clásicas", expone el pianista italiano, aunque por encima de todo, "la idea es que la música de Ángel pase al repertorio de piano y pueda ser utilizada por otros pianistas".  "Es un enriquecimiento de la música de Ángel", añade Catherine, que define a su eterna pareja como "un genio con una sensibilidad muy especial".

Esa sensibilidad, a partir de la música que compuso para guitarra, y ahora llevada al piano, hace que "se le sienta presente en los conciertos en los que se interpretan sus composiciones", añade Catherine, que lo conoció en 1980 como profesor de piano. Fue ahí cuando "surgió un amor muy grande entre nosotros" que llega hasta el presente, de la mano de su recuerdo y de la vigencia de su música.

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