El Ayuntamiento de Cádiz ha aprobado en pleno y de forma unánime una declaración institucional para la creación de un monumento en honor a las víctimas de violencia de género en el cementerio mancomunado de Chiclana.

La iniciativa, respaldada por todos los tres grupos municipales en el pleno --PP, PSOE y Adelante Izquierda Gaditana--, representa "un compromiso firme" de la ciudad con "la memoria, la justicia simbólica y la lucha activa contra esta grave vulneración de los derechos humanos", como ha indicado el Ayuntamiento en una nota.

Así, la propuesta subraya "la urgencia de visibilizar el impacto de la violencia machista en la sociedad", y rinde homenaje a las mujeres y menores que han perdido la vida a lo largo de las décadas. "No se trata sólo de un acto simbólico, sino de una herramienta pedagógica y de concienciación social", se ha subrayado.

El futuro monumento se ubicará en el cementerio mancomunado de Chiclana, con una mención expresa a la memoria de las víctimas. Además, incorporará elementos educativos como placas explicativas y acogerá actividades anuales en torno al 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Entre los objetivos del proyecto, según apunta la declaración institucional, está el homenajear "de forma permanente" a las víctimas, "reconociendo su identidad y dignidad"; fomentar la reflexión social sobre la magnitud de la violencia de género y su prevención; reforzar el apoyo institucional a víctimas y familias, con un mensaje unánime de rechazo a la violencia; y educar a las futuras generaciones en valores de igualdad y respeto, "para que los feminicidios no se olviden ni se trivialicen".

La iniciativa se enmarca en el espíritu de la Ley Orgánica 1/2004 de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género y responde a demandas de colectivos feministas, asociaciones de víctimas y organismos internacionales como Naciones Unidas.

El consistorio gaditano ha reafirmado así "su compromiso con los valores democráticos de igualdad y no violencia", y convierte el espacio público "en un lugar de memoria, denuncia y esperanza".