Cerca de medio millón de euros destinará este año la Diputación de Cádiz a ayudar a los municipios costeros de la provincia a paliar los efectos del alga invasora Rugulopterix okamurae en las playas. Los ayuntamientos que han solicitado ayuda a la Diputación son San Roque, La Línea de la Concepción, Algeciras, Tarifa, Barbate, Conil y Rota. Los exactamente 493.000 euros en subvenciones se distribuyen entre estos municipios en función del número de habitantes, kilómetros de playas y grado de afección de la invasión. Así, San Roque percibirá una ayuda de 62.500 euros; La Línea de la Concepción, 90.000; Algeciras, 30.000; Tarifa 150.000; Barbate, 137.500; Conil de la Frontera, 18.000 y Rota 5.000 euros.
Es el cuarto año consecutivo que la administración provincial destina una partida económica específica para contribuir con los ayuntamientos del litoral afectado en los gastos que supone la limpieza y retirada de los arribazones. El montante económico invertido por la Diputación en estos años ha aumentado progresivamente, a razón de los gastos que han tenido que asumir los ayuntamientos y el número de municipios que solicitan esta asistencia. En 2022 se concedieron ayudas por valor de 142.400 euros; en 2023 la cifra aumentó hasta los 262.000 euros y en 2024 se alcanzaron los 340.000 euros. La suma de las cuatro anualidades -incluyendo la de 2025- está por encima de 1,2 millones de euros. Es una demostración, en definitiva, de que el alga invasora se extiende por el litoral gaditano y con ella, se acrecientan los problemas derivados de la presencia de esta especie.
Los gastos que se financian con estas ayudas tienen que ver con la contratación de servicios de limpieza específicos, compra de herramientas, alquiler de maquinaria, retirada, transporte y gestión de los arribazones de algas. Estos varían en función de las necesidades planteadas en su solicitud a la Diputación por los distintos ayuntamientos destinatarios.
La presencia de esta especie de alga de origen asiático se ha convertido en un grave problema para la biodiversidad y la integridad de los ecosistemas costeros y marinos del litoral gaditano. Desde el primer momento, la Diputación se ha mostrado sensible hacia esta situación, no sólo por las consecuencias medioambientales, sino por la afectación en sectores económicos de suma importancia en la provincia, como son el pesquero y el turístico.
Las acumulaciones de esta alga en las playas gaditanas (arribazones) suponen, mucho más allá de la mala imagen, un riesgo de salubridad pública debido a la descomposición de la materia orgánica. Por este motivo, los municipios afectados deben invertir recursos extraordinarios de sus propios presupuestos para hacer frente a este problema. La Diputación de Cádiz no tiene competencias directas en la materia, aunque ha entendido la necesidad de contribuir a paliar los efectos del alga invasora. De hecho, de momento sigue siendo la única administración que facilita a los ayuntamientos asistencia económica para este problema.
El medio millón de euros que la Diputación destina a este programa de ayudas forma parte del Plan Integral de Transición Ecológica, con el que el Área de la que es responsable el vicepresidente segundo Javier Vidal, aglutina este año todos los planes provinciales de cooperación municipal relacionados con el medioambiente. La inversión total del Plan Integral es de 3,5 millones de euros.
La resolución con las ayudas concedidas ha sido publicada en el Tablón de Anuncios y Edictos de la Diputación.
