El tiempo en: Utrera
Lunes 28/04/2025
 
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Barbate

Deja volar tu imaginación

Es increíble cómo el simple acto de imaginar algo puede abrirnos las puertas a los pequeños detalles

Publicado: 27/04/2025 ·
17:46
· Actualizado: 27/04/2025 · 17:46
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
  • Imaginación. -

Dejar volar la imaginación es el mayor acto de transformación social al alcance de cualquier persona. Desde que somos pequeños, nos enseñan que debemos ser creativos e imaginar aquello que nos gustaría para nuestro día a día o para nuestra vida. Si a un niño o niña le pregunto qué le gustaría ser de mayor, su imaginación vuela a la velocidad de la luz y se imagina siendo ingenier@, médic@, maestr@, cajer@, enfermer@, am@ de casa, cuidador@, contabl@, mariner@... Y no, ninguno se vería como influencer o futbolista. ¡Ves! Acabo de imaginar lo que me gustaría escuchar.

El problema que tenemos los “más adult@s” para dejar volar la imaginación es, justo, eso: que no nos permitimos que vuele, cree, piense y, al final, exista. Porque cuando éramos pequeñ@s nos enseñaron que un elefante no se puede pintar de amarillo porque es gris, que una casa no puede ser redonda porque es cuadrada o rectangular, que los barcos, si quiero que vuelen, se llaman aviones, que si dibujo a una persona con un solo ojo quizás sea un ogro, o que las nubes no pueden tener forma de algodón y al sol no le puedo pintar una cara porque no la tiene. Y es ahí, justo ahí, cuando se inicia el detrimento de tu propia imaginación.

¿O acaso piensas que un niñ@ va a querer pintar siempre el elefante de amarillo? ¿No crees que, con el tiempo y su madurez, llegará a la conclusión —cuando siempre los vea de otro color— de que quizás deba cambiar el color?

La imaginación es la mejor posesión de cualquier persona para ser feliz, pues es ahí donde se entremezclan tus recuerdos, tus vivencias más amadas, tus pasiones, y al final sois uno: tu imaginación y tú.

¿Sabéis por qué escribo sobre ello? Porque en una de mis sesiones de terapia le pedí a un alumno que nos describiésemos a la inversa. Él debía hacerlo conmigo y yo debía hacerlo sobre él. Cuando inicié mi descripción, ¿adivinad? Me quedé siempre en lo superficial, en lo que veo, palpo y compruebo. ¿Y sabéis lo que él destacó de mí, además de lo común? Que Mariloli siempre lleva una mochila. Además, especificó lo siguiente: “Mariloli siempre lleva una mochila con ella. Ahora siempre lleva la de Harry Potter porque le encanta, a pesar de tener más. Y si la veo con alguna más grande, es porque va al gimnasio. Allí, ella hace de todo, porque me la imagino siempre haciendo muchas cosas de ejercicios”.

Es increíble cómo el simple acto de imaginar algo puede abrirnos las puertas a los pequeños detalles.

Ahora que hemos sobrevolado el Día del Libro, quiero decirte que no te limites a lo establecido. Piensa en ese lugar mágico, ese rincón donde la felicidad siempre nos acompaña, donde cada pensamiento y cada sueño se convierten en tu propio refugio. En ese espacio podemos ser libres siempre, porque, al fin y al cabo, lo que siempre nos acompañará será nuestro propio pensamiento.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN