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Viernes 25/07/2025
 

Rota

IV Feria del Libro: un romance de verano entre Rota y la literatura

La que comenzó como una iniciativa local se transforma en un punto de encuentro para lectores, autores y libreros que va más allá de “nuestra patria pequeña”

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El Castillo de Luna y la plaza Bartolomé Pérez, dos enclaves emblemáticos del casco histórico roteño, se preparan para ser escenario de encuentro entre autores y lectores, libros y coloquios. La IV Feria del Libro ‘Escritora Almudena Grandes’ ya no se clasifica únicamente como una pequeña propuesta local: ha evolucionado potencialmente hasta convertirse en una de las citas más aclamadas de la programación del Verano Cultural. La Feria del Libro de Rota no solo es un evento, es una declaración de principios, una apuesta para convertir lo literario en algo más que una categoría cultural.

La ambición del programa, el creciente respaldo institucional y una respuesta del público que logra superar expectativas año tras año dan forma a esta feria. “El evento ya está asentado. La gente pregunta, está atenta, lo espera”, explica José Antonio Lucero, escritor, profesor y coordinador de esta Feria. Las fechas elegidas -del 23 al 26 de julio- no son fruto de la eventualidad, sino que se trata de una decisión causal.

De hecho, no siempre resulta conveniente para la atracción de autores con una carrera nacional consolidada, pues muchos utilizan la temporada estival para descansar o escribir. Sin embargo, siempre que se ha debatido esta cuestión entre organizadores se ha concluido que “una feria dedicada a Almudena Grandes debe celebrarse en verano”, insiste Lucero haciendo memoria de aquel “territorio de la felicidad” con el que la afamada escritora madrileña definía la localidad en verano. Con cada edición, la Feria del Libro de Rota ha ido evolucionando hasta ampliar sus límites.

Lo que comenzó entre las paredes del Castillo de Luna, en 2024 pasó a ocupar además la plaza Bartolomé Pérez, ganando visibilidad y tránsito. Este cambio, principalmente logístico, supone algo más profundo: sacar los libros a la calle permite un acercamiento de la literatura para quien quizás no pensaba detenerse ante una portada o todo aquel que no ha descubierto aún el placer de leer. “Antes, en el interior del Castillo, la Feria estaba muy escondida. Si eres lector, sabes que está, la buscas igual”, afirman desde la librería Antídoto, “ahora queremos atraer otros perfiles para que disfruten de ese momento de lectura y de encuentro”.

Este deseo de ampliar el público al que se destina esta IV Feria del Libro se observa sobre todo en la programación infantil, que este año cuenta con la participación de Olga de Dios. Con libros como ‘El monstruo rosa’ o ‘Leotolda’, publicados en catorce países y traducidos a veinte idiomas, esta autora e ilustradora de origen vasco llega a Rota por primera vez en calidad de profesional. “Es una ilusión poder acercar mi trabajo a las niñas y los niños de Rota, explicar un poco de mi proceso de trabajo. Intento acercarles a mi obra, contar un cuento, dibujar con ellos si es posible”, cuenta con entusiasmo. Respaldada por su experiencia, tanto en el ámbito nacional como en el internacional, Olga subraya la relevancia de la inclusión de la infancia en los proyectos culturales. “Es importante que desde las instituciones y sus políticas públicas se promocionen actividades culturales y dentro de ellas hay que incluir a la infancia”, añade. Para ella, la Feria del Libro de Rota es una oportunidad para desligar a la localidad de un turismo más convencional, destacando su valioso potencial cultural.

Rota, núcleo de vitalidad literaria

La vinculación del municipio roteño con la literatura no es novedosa, aunque citas como esta han ayudado estructurarla, sirviendo como punto de encuentro entre autores y libreros. A esto se suma la profunda unión que existe entre figuras de renombre nacional, como Almudena Grandes, Luis García Montero o Benjamín Prado con este municipio gaditano. De esta tierra también han surgido respetadas voces literarias, tales como Ángel García López o Felipe Benítez. Este último, a pesar de no participar activamente en esta edición a falta de una obra por presentar, estará presente a modo de espectador y como parte de la entrega del premio del XIII Certamen de Poesía ‘Ángel García López’. “Estas cosas necesitan un proceso, un rodaje”, considera .“Pero es un proyecto que está implantándose con fuerza. Cumple su finalidad: acercar el libro tanto a los lectores habituales como a los potenciales y ocasionales”.

La inclusión de la entrega del Premio de Poesía ‘Ángel García López’ en el desarrollo de esta cita por segundo año consecutivo la dota de emotividad, pues este es el primer año que el certamen se ve privado de la presencia del gran escritor roteño. “Es un motivo de tristeza, de melancolía, pero supone también una manera de tenerlo presente en el recuerdo de sus paisanos, de sus amigos”, señala Benítez. Para José Antonio Lucero, la vinculación de este premio con la Feria del Libro “casa perfectamente”, ya que se trata de un premio “de recorrido histórico, no solo en el pueblo, sino a nivel nacional”. El acto contará, como era de esperar, con un homenaje especial al poeta roteño.

Vocación de frontera abierta

 A pesar del fuerte componente local que caracteriza la trayectoria de esta feria, esta no se cierra a otras geografías. En ella se busca incorporar autores nacionales con el reclamo de que en Rota podrán encontrar un entorno receptivo para la presentación de sus obras. “El hecho de que la feria esté dedicada a ella (Almudena Grandes) es una cuestión que hace de ‘gancho’ para autores cuya obra ha estado vinculada a Almudena o haya tenido cierta relación con ella”, afirma Lucero.

Además, al igual que ocurría con Almudena Grandes y Luis García Montero, muchos se sienten atraídos por la idoneidad de esta localidad para su descanso en los meses estivales. La acción de conocer autores reconocidos o emergentes también funciona a la inversa, de Rota hacia fuera. La Feria del Libro es una plataforma que resulta beneficiosa para aquellos autores que buscan consolidar su trayectoria profesional fuera de los márgenes de la localidad. No solo es el caso de Antonio Fuentes, periodista reputado de origen roteño, que presenta en esta feria ‘Los Leones de Rota’, obra que rescata uno de los muchos episodios silenciados de la Guerra Civil.

El propio José Antonio Lucero dará a conocer también su nueva novela ‘El Alumno’, continuación de ‘La Maestra’, su mayor éxito editorial que cuenta ya con nueve ediciones y que a día de hoy sigue encontrando nuevos lectores. “Para mí es muy especial presentar este libro en Rota”, afirma Lucero, “por mucho que podamos (los escritores) conseguir éxitos editoriales más allá de nuestra patria pequeña, es importante que tengamos un lugar donde sentirnos queridos y arropados por los vecinos”.

En definitiva, es el amor a la literatura -sin solemnidades ni pretensiones vacías- el motor con el que funciona esta IV Feria del Libro. No hay en ella otra motivación que compartir el espacio público para hacer de los libros un bien común. De esta manera, con naturalidad y cercanía, conseguir hacer de este encuentro un lugar donde poder disfrutar de la literatura a pie de calle.

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