El Ayuntamiento de Granada, a través del Área de Participación Ciudadana, ha celebrado una sesión extraordinaria del consejo municipal de participación vecinal en la que se ha presentado el Plan de adaptación al cambio climático, renaturalización y resiliencia (Paccrr), enmarcado en el proyecto europeo "Granada Respira".
El encuentro, presidido por el concejal de Participación Ciudadana, Francisco Almohalla, tuvo como objetivo dar a conocer las líneas estratégicas del plan y recoger propuestas vecinales para construir, de forma colaborativa, una ciudad más sostenible, resiliente y saludable, según se recoge en una nota.
Este plan forma parte del proyecto Granada Respira, financiado por la Unión Europea a través de los fondos Next Generation y subvencionado por la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
Este plan permitirá a Granada estar más preparada para afrontar las consecuencias del cambio climático, adoptar y reforzar actuaciones para mitigarlo, implementar acciones para renaturalizar la ciudad como medida transversal para la adaptación y mitigación y, en definitiva, hacer una ciudad más resiliente, saludable y sostenible, en la que la vida se sitúe en el centro, según el ayuntamiento.
El consejo municipal, presidido por el Concejal de Participación Ciudadana, Francis Almohalla, ha sido el foro donde se ha explicado el contenido del plan y se ha dado voz a las asociaciones vecinales para que aporten propuestas de mejora.
"El objetivo es construir una ciudad más habitable y sostenible, en la que la ciudadanía participe activamente en la toma de decisiones que afectan al futuro de Granada", ha manifestado Almohalla.
En ese sentido, el edil ha subrayado el papel fundamental que juega el pleno vecinal como espacio de escucha activa y diálogo entre vecinos, asociaciones y responsables públicos. Gracias a esta herramienta, Granada ha recogido más de 15.000 propuestas vecinales en el último año, consolidando un modelo de gobernanza abierto, transparente y participativo.
Esta apuesta por la participación cobra especial relevancia en el contexto actual, marcado por la puesta en marcha de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en la capital.
Desde el pasado 1 de octubre de 2024, la ZBE se encuentra en fase informativa, y será a partir del 1 de octubre de 2025 cuando comiencen a aplicarse sanciones a los vehículos que incumplan las nuevas restricciones.
La zona afectada abarca prácticamente todo el término municipal de Granada (23,55 kilómetros cuadrados) y estará activa todos los días del año, durante las 24 horas, limitando la circulación de vehículos sin distintivo ambiental, salvo excepciones como residentes o colectivos concretos.
Según Almohalla, la implantación de la ZBE está alineada con los objetivos del proyecto "Granada Respira" y responde a una necesidad urgente: mejorar la calidad del aire en una ciudad que sufre altos niveles de contaminación.
"Una sociedad bien informada y consultada acepta mejor los cambios si entiende sus beneficios: en salud, en movilidad, en calidad de vida; por eso, la ZBE no es solo una restricción, es una oportunidad para transformar Granada", ha afirmado el concejal.
La sesión también contó con la intervención de la consultora externa Considera, encargada del Plan de Gobernanza y Participación y del Plan de Comunicación del proyecto "Granada Respira", que presentó las herramientas puestas en marcha para garantizar una participación efectiva y plural.
Entre las próximas actuaciones anunciadas, el concejal destacó la intensificación de campañas de información en los barrios, colegios y asociaciones vecinales para explicar en detalle el funcionamiento de la ZBE y sus beneficios.
