La Consejería de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía ha aprobado el expediente de contratación de las obras para sustituir el pavimento del pabellón polideportivo 'Antonio Rivera' de Almería, situado en el Estadio de la Juventud Emilio Campra, con un presupuesto de 322.688,61 euros y un plazo de ejecución de dos meses.
El nuevo suelo ocupará una superficie de 1.327 metros cuadrados y será apto para la práctica de baloncesto, balonmano, fútbol sala y voleibol, con un rendimiento técnico certificado FIBA level 1, el más alto para este tipo de instalaciones, según recoge la memoria del proyecto consultada por Europa Press.
El origen de esta intervención se encuentra en el "estado de deterioro por desgaste" del actual pavimento, que ha sido muy castigado por el uso continuado y el paso del tiempo.
Las juntas del entablillado y los encuentros del borde de la pista presentan un "mal estado generalizado", lo que ha llevado a concluir que "ha alcanzado el final de su vida útil". Por ello, la reparación no resulta viable dentro de las labores ordinarias de mantenimiento y se ha optado por su completa renovación.
La actuación contempla la instalación de un pavimento área-elástico de haya maciza sobre rastreles multilaminados con espuma amortiguadora, fijado sobre una base tratada con membrana epoxi y mortero autonivelante.
El entarimado, de 22 milímetros de espesor y 3,5 metros de largo, incluirá varias capas de barniz deportivo en fábrica y permitirá hasta diez lijados. Además, contará con un sistema de ventilación perimetral mediante cámara con rodapié de acero inoxidable, y con anclajes para el equipamiento deportivo, cuyas tapas quedarán enrasadas y disimuladas en la superficie.
También se ha previsto el marcado de pistas en distintos colores conforme a la normativa NIDE y ensayos 'in situ' por un laboratorio homologado para verificar características como la absorción de impactos o el control de deslizamiento.
Del total de la inversión, un 71,82 por ciento se destinará al revestimiento de la nueva tarima. Le siguen las labores de impermeabilización de la solera, con un 17,60 por ciento, y las demoliciones y actuaciones previas, que suponen otro 6,86 por ciento. El resto del presupuesto se reparte entre trabajos de pintura, instalaciones, control de calidad, gestión de residuos, y medidas de seguridad y salud en la obra.