El Castillo El Bil Bil en Benalmádena ha acogido un encuentro sobre movilidad en la Costa del Sol. Hablamos del foro Encuentros Publicaciones 7.0 que ha versado sobre ‘Retos de la Movilidad en la Costa del Sol y en el Campo de Gibraltar’, conducido por la periodista Ana Huguet que ha contado con la presencia del presidente de la Diputación de Málaga, Francisco Salado, y su homólogo en la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Occidental, Manuel Cardeña; además de la presidenta de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, Susana Pérez Custodio, la alcaldesa de Mijas, Ana Mata, el alcalde de la Línea de la Concepción, Juan Franco, el regidor de Benalmádena, Juan Antonio Lara, y la primera edil de Algarrobo, Natasha Rivas.
Huguet ha recordado las circunstancias que se viven actualmente en un espacio geográfico donde se sitúa el único municipio de España de más de cien mil habitantes sin conexión ferroviaria, donde se paga el peaje por kilómetro más caro de todo el país. Y es que, solo en la Costa del Sol occidental viven unas 600.000 personas, pero si se suma al Campo de Gibraltar, hablamos de entorno a 1.000.000 de habitantes que “comparten aeropuerto, lugares de trabajo, incluso universidad y para desplazarse de un municipio a otro no existe el tren, cuentan con una autovía bastante colapsada y como alternativa, una autopista de peaje que supone para un trabajador un desembolso mensual de hasta 400 euros”.
Autopista de pago y más
El coloquio ha arrancado echando un vistazo a lo que supone el elevado peaje de la AP-7, pero no solo eso, porque como señaló Salado, “la falta de movilidad en la Costa del Sol Occidental y toda la provincia de Málaga supone un parón importante al crecimiento económico y social de toda la provincia y de la costa hacia dentro”.
Porque, supone una imposibilidad “de seguir creciendo. Para Salado, “el gobierno central mata a la gallina de los huevos de oro, porque recaudó el año pasado 5.500 millones de euros de todos los malagueños, de toda la provincia de Málaga, de las distintas actividades, los distintos impuestos y en este primer cuatrimestre de dos mil veinticinco, ha aumentado 20% y Málaga tiene muchas posibilidades de seguir creciendo, porque todo el mundo ha puesto el ojo en la Costa del Sol para invertir, para vivir, pero no hay esa reciprocidad de que yo te doy y tú inviertes aquí para seguir creciendo”.
Salado insistió en la necesidad de inversiones por parte de un Gobierno de Pedro Sánchez que “da la espalda a Málaga para beneficiar a otros territorios” y al que reprocha que no tenga un cronograma ni a corto, ni a medio, ni largo plazo. Todo ello, pese a la necesidad de cumplir con la bonificación de la AP-7, medidas como carriles reversibles en la zona de la Axarquía y la Costa del Sol Oriental, así como mejora en accesos a la A-7, y por supuesto, acelerar los estudios para el tren litoral que debe unir Nerja con Algeciras. Mientras tanto, también una mejora de las líneas de Cercanías de Renfe, tanto la de Benalmádena, colapsada y con incidencias a diarios, como la C-2 con la zona de Cártama, que tiene unas frecuencias horarias que no lo hacen atractiva, en medio.
Estrés sin sostenibilidad
Porque actualmente, se vive sometiendo a los usuarios a estrés, más contaminación, problemas para acceder a trabajar a la Costa del Sol, y bajo la posibilidad de pérdida de empresas y empleo. Salado achaca lo que sucede a falta de voluntad política y lamenta que, cuando cumple con los ciudadanos en reivindicar todas estas cuestiones, se les acuse de buscar la confrontación. Por ello, pide que la sociedad civil se implique en la demanda de las cuestiones pendientes, porque “a la sociedad civil no se le pueden negar las cosas”.
Por su parte, Cardeña se refirió al impacto en términos económicos, sociales de la falta de infraestructuras para costa del Sol Occidental, que “supone una barrera más para el desarrollo, para la riqueza y el empleo”. Destacó que “estamos en una población casi fija de 1,2 millones de habitantes, en un nivel de crecimiento importantísimo y al final, no solo esa población que está en la Costa del Sol sufre ese problema, sino también colapso a toda esa zona de influencia de la Costa del Sol, zona Monda, Coín, que baja a consumir, a trabajar a Costa del Sol y también pues desemboca en la antigua nacional 340 con un colapso casi diario imposible de llegar a al niño al colegio, a su jornada laboral y se puso también mucho desgaste y mucha pérdida de hora de trabajo por esas horas que se pierden en la carretera”.
Además, recordó las dificultades que supusieron crear una zona industrial en el Campo de Gibraltar y una zona turística y comercial también aquí en el Campo de Gibraltar”, ante lo que “solucionar la movilidad es cuestión de voluntad, de presupuesto, de hacerlo posible. Y sobre todo, que hay una demanda ciudadana de movilidad sostenible”.
En este contexto, Salado volvió a recordar la importancia por volumen de viajeros esperado del futuro Tren Litoral, y exigió acelerar los plazos, porque en caso como Vigo se ha hecho, y ante la demanda de un transporte sostenible que contribuya al desarrollo de la Costa del Sol.
Desde Campo de Gibraltar se pone sobre la mesa su aislamiento
En un contexto en el que desde Benalmádena, Mijas y Algarrobo su alcalde y alcaldesas también coincidieron en fijar su mirada en los problemas de tráfico y en las necesidades de soluciones de movilidad en las autopistas y a través del tren, desde Campo de Gibraltar, tanto el alcalde de la Línea, Juan Franco, como la presidenta de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar, Susana Pérez Custodio, pusieron el acento en el aislamiento al que consideran que, actual e históricamente, se ven sometidos.
Para Franco, “estamos hablando creo que de uno de los problemas más grandes que tenemos”, porque “nosotros estamos en un fondo de saco, y como digo siempre estamos en la periferia de la periferia de la periferia”. Lamentó que en el estudio del Tren Litoral se les haya dejado fuera, pero también, la mala comunicación ferroviaria actual, así como por carretera con Málaga y con la propia Cádiz.
Por su parte, la actual situación de falta de infraestructuras adecuadas, para Pérez Custodio se puede “resumir diciendo que frena nuestro crecimiento, que ya viene frenado de antemano”. Corroboró lo expresado por Franco sobre conexiones con Málaga o con Cádiz capital para expresar que “creo que el Campo de Gibraltar ha sido y lo dejan seguir siendo una isla completamente incomunicada pero ya no solo a efectos de turismo, a efectos de inversiones, de crecimiento empresarial, sino a efecto de cohesión social”.
Así, señalo que los 300.000 campogibraltareños “más los que se nos puede unir con Gibraltar, que todo creo que vamos a celebrarlo interactuando unos con otros, estamos completamente aislados por carretera y por ferrocarril”.
Pese a la presencia del Puerto de Algeciras, o a que todos los días “nuestra carretera soporta miles de camiones”, lo que hace que no haya que hablar ya “de un futuro tren litoral, que lo veo muy lejano, como esa distancia que hay entre Algeciras y Málaga, enorme”, sino de “las comunicaciones en nuestra bahía”.
En cualquier caso, también pusieron sobre la mesa en el foro de Publicaciones del Sur, el esfuerzo que supone la conexión de la comarca campogibraltareña con la de la Costa del Sol y con Málaga, con el elevado precio que hay que pagar tanto en peaje, como en gasto de gasolina en unas vías que se encuentran colapsadas.