Ya lo comentaba el arqueólogo Daniel Jiménez: no se entendía que Arcos no tuviera un espacio museístico que diera fe de los yacimientos que existen en el término municipal y sobre los que pesa, haciendo justicia, la necesidad de un profundo estudio, salvo, eso sí, los realizados en el romano de Sierra de Aznar. Todo a propósito de la feliz inauguración de la primera sala dedicada a la arqueología que abre al público en el Palacio del Mayorazgo la Delegación municipal de Patrimonio, empecinada desde su reciente creación en salvaguardar y fomentar la riqueza arqueológica y monumental que atesora Arcos.
Se pone así “la primera piedra” para la aspiración de crear un gran museo arqueológico que ya contaría con el apoyo y colaboración de la Diputación de Cádiz que se responsabilizaría del proyecto. Por ahora, la sala inaugurada ya contempla piezas de gran valor histórico. El delegado de Patrimonio, Andrés Camarena, aprovechaba para agradecer nuevamente las numerosas donaciones recibidas de particulares que han dado contenido a la sala museística. A este respecto, recuerda la confluencia en el término de Arcos del yacimiento romano de Sierra Aznar, la villa romana de El Santiscal y el yacimiento de la Junta de los Ríos, entre otros, que dan sentido al antiguo nombre de la ciudad Arx Arcis como legado, además, de la cultura musulmana asentada durante siglos en el territorio y cuyo testimonio más fiel es el propio amurallamiento de la ciudad, con su torre de El Cómpeta -supuesta tercera entrada- o el propio castillo de la Plaza del Cabildo.
La apertura de este espacio museístico coincide con la conmemoración de las Jornadas Europeas de Arqueología a las que el Ayuntamiento se ha sumado con un programa propio que recogía, entre otras actividades, el desarrollo de un taller para el alumnado local. Esta actividad forma parte a su vez del programa ‘Planeamos’ de Diputación y ha sido organizada técnicamente por la empresa Albanta Educación que dirige el arqueólogo Daniel Jiménez. Precisamente ha sido el arqueólogo quien destacaba la jornada como “un día histórico”, al considerar los primeros pasos para la creación de un museo como un hecho tan lógico como demandado por los propios arqueólogos. Se trata, explica, de un espacio donde ciudadanos y visitantes podrán conocer la historia de Arcos y, por ende, protegerla. Jiménez lamentaba en este sentido que se hayan perdido posiblemente miles y miles de piezas arqueológicas por no haber un lugar donde exponerlas y custodiarlas, dado además que muchas personas han sido todos estos años reacias a donarlas al Museo Arqueológico de Cádiz. No obstante, señalaba, aún estamos a tiempo de recuperar gran parte del patrimonio en este sentido. El arqueólogo llegó a decir que el delegado municipal de Patrimonio es “una cabeza visionaria” por haber promovido este espacio y otras iniciativas.
El delegado Andrés Camarena se congratulaba de que Arcos fuera en sí mismo un museo abierto gracias a sus monumentos y a los abundantes vestigios de otras civilizaciones que perduran en el entramado urbano y en el paisaje. Una de las piezas más valiosas, explica el delegado, es el área votiva de la Basílica Menor de Santa María que será restaurada en breve y que forma parte de un entorno declarado Bien de Interés Cultural. La idea es que luzca en su esplendor y con su leyenda legible.
En el terreno político, destacaba cómo el anterior equipo de gobierno tenía “abandonada” la preservación y conservación del patrimonio local.
El alcalde de la ciudad, Miguel Rodríguez, felicitaba todas estas iniciativas porque “Arcos tenía que tomar una determinación” respecto a la preservación de su historia. Ocasión que aprovechaba para invitar a la ciudad tanto a visitar el espacio museístico como a ayudar en esa tarea de salvaguarda de la cultura.
