Unos 12,5 millones de personas están en riesgo de pobreza o exclusión social en España, una cuarta parte de la población, la cifra más baja de la última década (desde 2014), aunque sube una décima la pobreza severa que alcanza a 4,1 millones de personas, frente a los 3,9 millones de 2023, según el XV Informe Anual 'El Estado de la Pobreza', elaborado por la Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES).
Según el estudio, basado en los datos de la última Encuesta de Condiciones de Vida y presentado este miércoles en Madrid, la tasa AROPE --personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social-- ha descendido en el último año pasando de un 26,5% en 2023 a un 25,8% en 2024 (0,7 puntos porcentuales menos). En total, están en esta situación 12,5 millones de personas --una de cada cuatro personas--, 200.000 menos que el año anterior.
"Hemos visto que la pobreza ha bajado, que las medidas que van dirigidas contra la pobreza funcionan pero también hemos visto que esto tiene un límite. Pero el límite no puede estar basado en cuestiones ideológicas. Muchas veces se nos dice que el mero crecimiento va a erradicar la pobreza pero desde 2013 el PIB por persona ha aumentado un 40% y la pobreza se ha reducido en un 3,43%. Pero, además, desde 2014 vemos que el nivel de desempleo ha bajado 13 puntos y la pobreza, 8. En definitiva, no el mero crecimiento reduce la pobreza", ha advertido el presidente de la EAPN en España, Carlos Susías, en la rueda de prensa para presentar el análisis.
Tal y como ha puntualizado el responsable del informe de este año, Alejandro Sanz, en 2024 han mejorado los tres componentes de la tasa AROPE --riesgo de pobreza, carencia material y social severa y baja intensidad en el empleo--, algo que achacan al aumento de las rentas que se ha vivido este año por las medidas de carácter social como "la subida del salario mínimo", el "impulso al Ingreso Mínimo Vital (IMV) o el incremento de las pensiones sujetas al IPC".
Aun así, ha alertado de que atendiendo solo a la tasa de pobreza, el 19,7% de la población española, es decir, cerca de 9,6 millones de personas, sigue estando en riesgo de pobreza, medio punto por debajo que en 2023 y el sexto valor más alto de la Unión Europea.
Además, el informe advierte de que las políticas no están alcanzando la intensidad suficiente para proteger a las personas que viven en condiciones más precarias.
Este hecho se constata con la cifra de personas en situación de pobreza severa, es decir, en hogares con ingresos inferiores a 644 euros al mes por unidad de consumo. En 2024, el 8,4% de la población española, unos 4,1 millones de personas, se encontraban en esta situación, una décima por encima que el año anterior (8,3%), cuando eran 3,9 millones de personas las que se encontraban en situación de pobreza severa.
Además, EAPN-ES avisa de que la mejoría tampoco llega por igual a toda la población. En concreto, de los datos se desprende que más de la mitad de la población migrante extracomunitaria se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social.
2,3 MILLONES DE NIÑOS EN RIESGO DE POBREZA
Asimismo, desde la Red muestran especial preocupación por la "alarmante" tasa de pobreza infantil en España, la más alta de la UE con 2,3 millones de niñas, niños y adolescentes pobres. Además, apuntan que 3 de cada 10 personas en hogares con menores se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social; porcentaje que aumenta a más de la mitad en las monoparentales (50,3%) y al 49,1% en las numerosas.
A eso se suma, según EAPN-ES, que pese a la mejora generalizada, los datos actuales mantienen a España lejos de los compromisos internacionales adquiridos por los sucesivos Gobiernos en el marco de la Agenda 2030. En el caso de la tasa AROPE, sería del 20,1%, es decir, 2,8 millones de personas deberían haber salido del riesgo de pobreza y/o exclusión social en 2024.
Aunque las cifras aún sean elevadas, desde EAPN-ES destacan la importancia del papel del Estado para reducir estas tasas. Dentro de las transferencias de las administraciones públicas, los autores del informe han analizado las ayudas por hijos, para la vivienda o los estudios, prestaciones por desempleo, por vejez, por supervivencia, por enfermedad, por invalidez, el Ingreso Mínimo Vital y las rentas autonómicas.
Según aseguran, el Estado del Bienestar evitó que 11,1 millones de personas entrasen en situación de pobreza en 2024 y sin las transferencias del Estado, incluidas las pensiones, la tasa de pobreza sería más del doble (subiría del 19,7% al 42,6%), y 2,6 millones de personas más estarían en situación de pobreza severa.
Si bien, EAPN-ES advierte de que en comparación con otros países de la UE con estándares de vida similares --Francia o Irlanda--, se observa que el efecto protector del Estado es menor. Por ejemplo, señala que, en el caso de la pobreza infantil, las ayudas y prestaciones reducen la tasa de pobreza infantil un 20,2%, menos de la mitad que la media europea (41,9%). Por ello, aseguran que existe "margen de mejora".
VIVIENDA Y DISCAPACIDAD, FACTORES DE POBREZA
Por otro lado, el informe apunta que la vivienda se consolida como un factor de empobrecimiento, debido especialmente a los precios de los alquileres. Así, según el estudio, el gasto en vivienda se lleva más de un tercio de los ingresos de las personas pobres (35,5%), que disponen de 333 euros de media tras pagar el alquiler, y de 370 euros una vez abonada la cuota de la hipoteca.
Por otro lado, según el informe, el 32,9% de las personas con discapacidad está en situación de pobreza y/o exclusión social, una cifra que empeora durante la edad laboral. El 40,7% de las personas con discapacidad de entre 16 a 64 años está en riesgo de pobreza o exclusión social.
En este contexto, desde EAPN-ES urgen a las formaciones políticas a tener "altura de miras" y aprobar en la presente legislatura el Pacto de Estado contra la Pobreza, "que se encuentra parado en el Congreso".
La entidad pide que esta iniciativa contenga medidas que garanticen ingresos dignos en todas las etapas de la vida --entre ellas la prestación universal por crianza--, acceso a una vivienda digna, empleo de calidad, educación inclusiva, políticas de cuidados y corresponsabilidad, propuestas para luchar contra la aporofobia y fomento de la gobernanza.
"Los datos todavía son insuficientes, esperamos que las decisoras y decisores políticos estén a la altura", ha manifestado la responsable de Incidencia de EAPN-ES, Ruth Caravantes. "Se necesitan acuerdos de país que alcancen más de una legislatura", ha zanjado.
