El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente del país, Dimitri Medvedev, ha afirmado este martes que el objetivo final de las conversaciones con Ucrania es el de "lograr la victoria total" de Moscú sobre Kiev y garantizar la "destrucción completa del régimen neonazi" ucraniano.
"Las conversaciones de Estambul no son un compromiso para lograr la paz sobre los términos delirantes de otros, sino una posibilidad de garantizar la victoria", ha aseverado en un mensaje difundido a través de su cuenta en Telegram.
Es por ello que ha sostenido que las negociaciones entre las delegaciones de Rusia y Ucrania no son "necesarias para trazar compromisos" y ha defendido la postura de Moscú, que sigue reclamando las provincias ucranianas de Jersón, Zaporiyia, Lugansk y Donetsk, situadas en el este del país.
Sus palabras han llegado un día después de que Rusia entregara el esperado memorándum con su propuesta par un alto el fuego en Ucrania tras una hora de reunión entre las dos delegaciones. El texto propone una tregua a largo plazo en algunas zonas y la retirada ucraniana de las citadas provincias.
Así, ofrece dos opciones de alto el fuego entre las que podría elegir Ucrania. La primera supone firmar un memorándum de 30 días que incluiría el compromiso de retirada de las Fuerzas Armadas de Ucrania de Lugansk, Donetsk, Jersón y Zaporiyia. En ese plazo Ucrania deberá completar también la retirada total de sus fuerzas del territorio de la Federación Rusa, según el texto.
La segunda opción de alto el fuego contempla un paquete de diez condiciones que deberán cumplir las partes y que no han trascendido. Entre estas medidas se encuentra el repliegue de fuerzas ucranianas a una distancia considerable de la frontera rusa, el final de la movilización y la negativa al despliegue de fuerzas de terceros países en territorio ucraniano, entre otras cuestiones.