El Ayuntamiento de Jerez no puede ofrecer compensaciones o exenciones de tasas a los negocios de la Plaza Rivero, ya que se lo impiden el texto legal de las ordenanzas y el plan de ajuste. Como alternativa, desde el Gobierno local se les ha ofrecido que presenten reclamaciones patrimoniales con las que justificar las pérdidas acumuladas como consecuencia de la prolongación de las obras en la plaza, de manera que puedan ser atendidas por los departamentos municipales correspondientes.
Así lo ha explicado la delegada municipal de Comercio, Nela García, quien confirma que ya trasladó la propuesta a los negocios afectados el pasado mes de febrero; “sin embargo, no hemos recibido aún ningún escrito por su parte”.
En enero pasado, desde Vox se solicitó el estudio de compensaciones para dichos negocios “puesto que las obras se alargaron y ellos no tienen la culpa”, pero la única alternativa posible es la defendida por García. “La conocen y hemos puesto a su disposición a nuestros técnicos para ayudarles a hacer las reclamaciones”. "Hay que actuar en base a un marco legal, y no podemos hacer compensaciones de tasas ni exenciones", insiste la delegada.
Del mismo modo, la delegada recalca que, en modo compensatorio, la plaza ha sido incluida en el plan de dinamización del centro para acoger actividades con motivo de grandes eventos, caso del Gran Premio, las veladas del verano, las actividades de dinamización comercial, así como se está trabajando con el área de Servicios Públicos para realizar varias mejoras estéticas en plaza, como cambiar los pivotes por maceteros más atractivos, mejorar la iluminación y "hacer el espacio más habitable".
No obstante, desde Vox recuerdan algunos ejemplos previos que pueden servir de referencia para apoyar las exenciones esperadas por los hosteleros. "En Semana Santa compensaron a los ambulantes que no pudieron vender el año pasado a causa de la lluvia y la normativa es la misma. También iban a contemplar compensar a los propietarios de vados de coches en las calles del centro cerradas al tráfico por las obras", apunta el portavoz municipal, Antonio Fernández.
Sin embargo, la delegada de Comercio apunta que las situaciones planteadas por Vox "son diferentes entre sí. Con los ambulantes lo que se hizo fue que la tasa abonada en 2024 se trasladara a 2025 y no han tenido que volver a pagarla. El hecho imponible no se efectuó en 2024, pero aquí el velador se ha puesto, aunque los ingresos no hayan sido los esperados, pero el hecho imponible está ahí y no podemos trasladar la tasa de un año a otro por ese motivo, nos lo impide la ley".
Las obras
La plaza Rafael Rivero estuvo en obras desde el pasado mes de agosto hasta primeros de abril. En principio tenían que haber terminad oen enero, pero la empresa que ejecutaba los trabajos, Jaralia Integral S.L., solciitó hasta dos prórrogas para ampliar el margen. La primera de ellas el 30 de diciembre pasado, cuando le dieron hasta el 1 de marzo en respuesta a que los trabajos quedaron parcialmente suspendidos durante 35 días coincidiendo con el periodo navideño a instancias de la propia dirección facultativa. Y después se supo que se le había concedido una segunda ampliación del plazo con fecha límite hasta el 4 de abril a causa de la escasez y mal estado de los adoquines que deben ser reutilizados, lo que ralentizó la obra.
La noticia supuso un nuevo mazazo para los hosteleros que cuentan con negocios en la plaza y que han estado acumulando pérdidas desde finales del pasado verano; las más importantes durante las fiestas navideñas, en las que ni siquiera pudieron celebrar sus habituales zambombas a causa de la falta de espacio, sin olvidar la jornada de la Magna Mariana. Lo que no contaban era con seguir acumulando pérdidas con la llegada de la Cuaresma, ya que la Plaza Rafael Rivero es un habitual punto de encuentro durante esas fechas para buena parte del mundo cofrade.