El acto de conciliación entre el rey emérito Juan Carlos I y el expresidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla ha finalizado sin avenencia y sin que el monarca haya comparecido en la sala.
En concreto, la conciliación ha comenzado a las 10.05 horas y ha finalizado a las 10.20 sin un acuerdo entre las partes.
Juan Carlos I ha estado representado por la abogada Guadalupe Sánchez, que no ha atendido a la prensa a la salida del juzgado. Reclamaba 50.000 euros por manifestaciones injuriosas en programas de televisión al regionalista, que se ha presentado en el juzgado junto a su representante legal, el abogado catalán José María Fuster-Fabra.
El letrado del expresidente cántabro ha alegado que Revilla no ha mentido "y le piden que diga que ha mentido", según ha declarado a los medios.