Jaleo, el bar canalla especializado en comida callejera es la informalidad personificada bajo control. Lo que aparentemente es una contradicción define perfectamente el concepto del hermano pequeño de Jindama, que nació precisamente durante tenla transición del antiguo local al actual. Todo en apariencia se improvisa, pero todo está previsto y preparado para que nada falle.
En la plaza del Clavo, Jaleo cayó de pie y es punto de encuentro habitual de una clientela mayoritariamente joven que se aleja de formalismos para disfrutar de las cosas buenas de la vida.
Local con buena carta de vinos, tapas, montaditos, paltillos y hamburguesas tuneadas, muy del gusto de Manuel Loreto.
De los montados me quedo con el de Tía Lela, la madre de Manuel. No lleva nada más y nada menos que la pringá de mumá. Todo muy metido en la receta clásica de las berzas gitanas de las tatas de Santiago, a las que dedica buena parte de la carta. A la tía Catalina, el montadito de pollo, alioli y bacon; a la tía Soleá, el de carne de cerdo, mayonesa de mostaza, bacon y queso; a la tía Juana, el de mantecao sevillano (solomillo al whisky con papas fritas); a la tía Bastiana, el de chocos fritos y alioli, y al tío Juan, el de tortilla de patatas con mayonesa. Todos a 4,50.
JALEO. Pza. del Clavo, 1. 11403 Jerez, Cádiz.