El PSOE de Andalucía se suma a la conmemoración del Día de la Memoria Demcrática, 14 de junio, para rendir homenaje a las víctimas del golpe militar del 18 de julio de 1936, de la Guerra Civil española y de la posterior dictadura franquista. El partido recuerda que esta celebración se acoge a la Ley 2/2017, de 28 de marzo, de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, que consagra el deber de las instituciones y de la ciudadanía de reconocer, reparar y no olvidar. Andalucía fue uno de los territorios más duramente castigados por la represión franquista.
Según estudios históricos y datos recopilados por la Junta de Andalucía y distintas asociaciones memorialistas, más de 60.000 andaluces y andaluzas fueron represaliados durante y después del conflicto. De ellos, más de 50.000 fueron víctimas de procesos sumarísimos, ejecuciones extrajudiciales, encarcelamientos y trabajos forzados.
Se estima que en el sur de España existen más de 700 fosas comunes, lo que convierte a Andalucía en la comunidad autónoma con mayor número de víctimas desaparecidas. Lugares como la fosa de Pico Reja, en el cementerio de San Fernando de Sevilla, o el cementerio de Málaga, que albergaron a miles de andaluces y andaluzas, o la fosa de Nerva, la mayor e de España en zona rural, son testigos silenciosos del horror y del olvido al que se quiso condenar a miles de personas.
Los socialistas quieren denotar que estas cifras no son "solo números sino que son nombres, son historias y familias rotas". En materia legislativa sobre este asunto se conoce el mandato de la Ley de Memoria Histórica y Democrática de Andalucía, una ley que reconoce el derecho a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición. Sin embargo, "hoy debemos alzar también la voz para denunciar con claridad el abandono, el incumplimiento y el bloqueo institucional de esta ley por parte del actual Gobierno andaluz, presidido por Juan Manuel Moreno Bonilla y el Partido Popular" denuncian los socialistas andaluces.
Desde el PSOE de Andalucía, reafirmamos nuestro compromiso con los derechos humanos y con los principios universales de la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición. La memoria democrática no busca venganza, sino dignidad. No persigue dividir, sino construir una sociedad más justa, consciente de su pasado y orgullosa de sus valores democráticos. En este día de recuerdo, honramos a todas las víctimas de la violencia golpista y dictatorial. Nos comprometemos a seguir trabajando por la recuperación de sus cuerpos, de sus nombres y de su lugar en la historia. Porque no puede haber democracia sin memoria, ni futuro sin verdad.