Con una sonora pitada, las trabajadoras de los servicios de limpieza de dependencias municipales y centros escolares, se han manifestado este martes ante el Ayuntamiento de Cádiz para denunciar la precariedad laboral que sufren. Manuel Bienvenido, portavoz sindical, ha indicado que el equipo de Gobierno prepara los nuevos pliegos para la licitación de los servicios y deben incorporar mejoras, como en otros municipios del entorno, para dignificar las condiciones de un colectivo de entre 200 y 250 empleados, en su mayoría mujeres.
Entre las reivindicaciones, Bienvenido apunta reducir las 38 horas semanales a 35, así como rebajar la jornada a partir de los 60 años, dado que las trabajadoras sufren dolencias crónicas en muchos casos vinculadas al desempeño de su profesión, que se agravan con la edad.
Bienvenido también apunta que es condición obligatoria actualizar los pluses que reciben, sin actualizar desde hace casi 20 años, y equiparar los sueldos de las eventuales con la plantilla. Finalmente, exige al Ayuntamiento que medie para que Limasa cumpla con el convenio, congelado desde 2023.